lunes, 29 de noviembre de 2010

SÓLO SOMOS NIÑOS ASUSTADOS EN LA INMENSIDAD.



Hoy no me apetece escribir, no me apetece nada porque al ver lo que hay alrededor de mí me da pena hacerlo, me da pena el odio, me enerva que la gente me mire sin saber lo que hay detrás de mi sombra, de lo que cuelga de mi interior, me entristezco al pensar en las muchas personas que se creen felices sin serlo... Me da pena sentarme en le sofá, encender la televisión y oir crisis, y oir muerte, y oir dolor... Me entristezco cuando al mirar más allá no encuentro nada, sólo una mirada reflejada que me indica que estoy solo en este mundo, sin nadie como yo, solo... Me da miedo esa soledad que a veces se apodera de mi cuerpo y parece que va acabar conmigo... Me da pena ser diferente en un mundo de ineptas copias; no sirve de nada ser diferente si se te sientes solo, al fin y al cabo, ¿necesitamos ser sociales no?

Sólo siento asco hacía todos los demás, desde el rico prepotente hasta el vagabundo de la puerta de la iglesia que se muere por un trago de vino y un chute de vida, me dan asco porque no saben lo que es vivir, porque no saben sentir como se tiene que sentir y porque aunque vivan, están muertos en su propio miedo. Siento ganas de acabar con todo el mundo y quedarme yo, una guitarra, un libro y una botella de cerveza... y no sentir nada más, morirme en la podredumbre de la soledad antes de rodearme de carroñeros, Y ASÍ LO PIENSO.

2 comentarios:

  1. Todos tenemos dias asi.
    Oye,la foto da un poco de grima,entre tu y yo.

    ResponderEliminar
  2. Algunos más que otros.
    Es mi nuca, no es nada en especial pero pensaba que tenía que poner algo sinsentido para darle algo de sentido a esta entrada.

    ResponderEliminar

Resquicio de nuestros gritos.